Ya que no puedo ser libre
agrandaré mis prisiones.
Cambiaré los tristes muros
por alegres horizontes.
No pisaré ningún suelo
sino abismos de la noche.
Techos que a mí me cobijen
cielos serán los mejores.
Ya que no puedo ser libre
agrandaré mis prisiones.
Manuel Altolaguirre,
Sin Libertad, (1955-1959)
El poema Sin Libertad de Manuel Altolaguirre, pertenece a la colección de Últimos Poemas los cuales fueron publicados entre 1955-1959. Dentro de la generación del 27, Manuel altolaguirre es uno de los poetas con una producción más breve de toda la generación del 27. Altolaguirre en sus poemas a través del uso de un lenguaje sencillo es capaz de expresar un gran sentimiento en sus obras. Un rasgo del autor claramente representado en este poema, es la forma en la que Altolaguirre canta a la soledad y a la muerte con tonos románticos. El mismo Manuel Altolaguirre dice que su estilo de escritura es hermano al de otro autor de la generación del 27, Pedro Salinas, debido al sentimiento humano que ambos aplican a sus obras.
El tema de dicho poema, como el nombre del mismo indica podríamos decir que habla sobre el encarcelamiento de la persona y de sus sentimientos. Aunque el autor indica que siempre se puede intentar hacer algo para conseguir de algún modo, lo que se quiere.
El autor a través del uso de la voz carmínica en la escritura de este poema, consigue aplicar al poema un sentimiento humano. El autor se está dirigiendo al lector y transmitiendo unas acciones que desea hacer en un futuro, esto se puede observar por el uso del futuro en la mayoría de los verbos, ‘’Cambiaré’’, ‘’Pisaré’’, ‘’Serán’’. Sin Libertad es un poema dividido en estrofas, concretamente en tres pequeñas estrofas. La primera y la última estrofa del poema son aleluyas, y la estrofa de en medio es una sextilla. Los versos del poema son octosílabos, y tienen una rima libre, pero todos los versos acaban en o/e, o o/e más consonante. En el poema predomina el uso de las oraciones subordinadas. En el poema se puede observar una epanadiplosis clara, ya que el poema comienza y acaba con la misma frase, ‘’Ya que no puedo ser libre agrandaré mis prisiones.’’ También podemos observar varias personificaciones, ‘’cielos serán los mejores.’’ Otro recurso estilístico presente en este poema es el encabalgamiento que podemos observar en los versos V.1, V.3, V.5, V.7, V.9. En este poema no hay ningún tipo de palabra que predomine sobre el resto, pero predominan los versos cortos. El autor crea una sinestesia en el tercer verso debido a que crea una imagen sensorial cuando dice, ‘’Cambiaré los tristes muros’’.
A lo largo del relato te das cuenta de cómo el poema no trata directamente el tema de la libertad, sino que habla más sobre el cautiverio y el sentimiento de no poder expresar lo que uno quiere.
Diego González Cano